Artistas digitales nos cuentan su experiencia vendiendo los NTFs de sus obras en el nuevo circuito de arte digital
Probablemente durante los últimos días hayas escuchado mucho acerca de la posibilidad de criptonizar o tokenizar tu arte. Se trata de crear los NTFs (las siglas en inglés de token no fungible) de tu obra lo cual te permite certificar la originalidad y, por ende, de acceder a un enorme mercado emergente. El surgimiento de nuevas galerías de arte digitales, o marketplaces, que permiten comprar y vender obras digitales validadas, ha suscitado un enorme interés en el mundo de los artistas digitales. Ahora bien, ¿qué son los NTFs? ¿Cómo se crean? y sobre todo, ¿Cómo se accede a estas galería? Tres artistas de la comunidad de Domestika que incursionaron en el mundo del cripto arte nos responden a través de sus propias experiencias.
Qué son los NFTs y por qué todo el mundo habla de ellos
El ilustrador especializado en 3D y lettering, Samaniego (@zigor), ha sido uno de los primeros artistas españoles en entrar al mercado del arte digital con resultados alentadores. Y lo hizo accidentalmente. En octubre recibió el mail de un marketplace especializado en arte digital por entonces desconocido (llamado Nifty Gateway) pidiéndole tres imágenes y dos videos de su Instagram para ofrecer en sus subastas.
“Me dijeron que me seguían en Instagram, que les gustaba mi trabajo y que pensaban que podían sacar dinero con él. A cambio, me pedían el 10% de comisión si la obra se vendía", repasa. “Les pregunté si lo iban a imprimir o qué porque no entendía qué querían hacer exactamente con mi obra. Me explicaron que iban a crear un NTF para cada trabajo pero no entendí nada”, confiesa. “La verdad es que no tenía nada para perder y los envié”. A los pocos días, la galería le comunicó a Zigor que una de las piezas, la animación Rojo Ramirez, se había vendido por 10 mil dólares y que se los transferirán de inmediato a su cuenta. Fue entonces cuando Zigor, y muchos de sus amigos artistas comenzaron a profundizar en lo que significa crear un NTF y la posibilidades que esto abría. Zigor explica que lo que él descubrió en octubre del 2020 es lo que el pasado 11 de marzo del 2021 descubrió el mundo, cuando la legendaria casa de subastas Christie's vendió su primera obra de arte digital por 6,30 millones de dólares. Esa suma sideral por la venta de la obra hizo que el artista Beeple pasara de ser un casi desconocido a convertirse en uno de los artistas vivos mejores pagos, y marcó un antes y un después en la historia de las cotizaciones de arte digital. ¿Cómo fue posible vender una obra por tanto dinero cuando cualquiera la podría tener descargando la imagen o haciendo una simple captura de pantalla? Gracias a la creación de su NTF.
Los NTF o token no fungible son un tipo de código encriptado que se le puede asignar a una pieza digital para identificarla como única y, por lo tanto, para darle un valor en el mercado del arte. Esta tokenización consiste en registrar los datos que identifican a la obra de forma unívoca unificando información que incluye el nombre del autor, el año en que se produjo la obra, su clasificación, el precio estimado, y otra información necesaria para identificarla fielmente y, proveerla de legitimidad. Este NTF es lo que adquiere un coleccionista cuando compra una pieza.
Para decirlo en otras palabras: cualquiera puede entrar al instagram de Zigor y hacer una captura de pantalla o descargar ilegalmente su contenido, pero solo Zigor, o quien compre esa obra tendrá en NTF que certifica que es el archivo original.
Cómo puede un artista tokaernizar su arte
El ilustrador y animador Joseba Elorza, conocido como Miraruido (@miraruido), se enteró a través de un podcast a finales de enero de este mismo año de la existencia de la posibilidad de tokenizar una obra y venderla y enseguida se puso a investigar. Descubrió entonces una de las plataformas más utilizadas por los artistas con deseos de entrar al mercado era Foundation. "A diferencia de las galerías que te contactan, los marketplaces como Foundation y Superare piden que el artista interesado se postule, llene un formulario, mande su trabajo y espere ser contactado", explica.
“Por entonces, el tema ya estaba empezando a explotar y había lista de espera”, describe el artista. Para cuando Foundation aceptó su trabajo, hace pocos días, Miraruido ya había logrado entrar de otra forma: por invitación de amigos artistas que ya había sido aceptados anteriormente.
Sin embargo, ser admitido en la red fue solo el primer paso. Como las galerías de arte digital online no trabajan con divisas oficiales sino con criptomonedas como ethereum o polkadot, Miraruido tuvo que crearse una wallet virtual que le permita hacer y recibir transacciones desde la red. Con esta wallet, comenzó por pagar los costos de la tokenización de su obra, es decir, de la creación de su NTF, requisito indispensable para poner una pieza a la venta.
La inversión inicial en NTF
La primera inversión que un artista debe hacer, es pagar los costos que implica generar el NTF. "El precio de estas operaciones puede oscilar entre los 40 y los 120 dólares, dependiendo la hora, y la cantidad de personas que están usando el sistema", describe el ilustrador y animador Miraruido antes de aclarar que nadie sabe exactamente cómo se generan estos cálculos. "Supuestamente tienen que ver con el gasto energético que implica hacer las operaciones y cuánta gente está haciendo lo mismo que tú en ese momento", detalla.
Miraruido llegó a pagar un costo de 100 dólares por transacción pero vendió su primera obra, una imagen llamada Let there be light, por 700 dólares a un desconocido con el cual no tuvo mayor contacto. "Pensé en mandarle la obra impresa pero no pareció interesado. Fue muy misterioso todo", revela. El dinero que ha ganado piensa invertirlo en publicar más obra en sus espacios, sumándose al plan que parece tener el mundo artístico en estos momentos: seguir apostando a los NTFs.
La responsabilidad por vender es ahora del artista
A estas alturas seguramente te estás preguntando, ¿cómo cambia el trabajo cotidiano de un artista la posibilidad de ingresar al mercado del cripto arte? Bajo la mirada atenta del creativo y director de arte Microbians (@microbians), quién también ha incursionado con su espacio en Foundation, el primer “trastorno” real que este boom de los marketplaces y casas de remate está provocando en la rutina de los artistas es una mudanza de redes sociales. “Todos estábamos apostando por Instagram pero de repente, Instagram quedó viejito. La imposibilidad de insertar enlaces que te lleven al marketplace en la que estás vendiendo es el principal problema y esto generó una mudanza masiva a Twitter”, observa.
Esto, para la mayoría, significó tener que comenzar desde cero. “Al no ser una red visual, los artistas tenían abandonado Twitter, no era un espacio de promoción. Ahora hay que conseguir los seguidores, usar los hashtags correctos y ponerse a circular en ese circuito. Después de todo, ahora la responsabilidad por vender es del artista”, observa. Esta tarea, admite, puede no ser tan fácil como parece. “De pronto aparece gente diciendo que está dispuesta a gastar 5 mil euros en arte digital y pide que los artistas les muestren su obra a ver si les convencen, que den retweets, inflan cuentas, las hacen crecer. Es todo tan extraño que uno no termina de entender si es real. Lo más loco, lo que nos tiene a todos enganchados, ¡es que podría serlo!”. Zigor tiene programada su próxima subasta en Nifty Gateway el 11 de mayo y coincide con Microbians. “Mi trabajo pasó a ser 50% crear y 50% vender en Twitter. Ahora tengo que mostrar un adelanto de lo que estoy haciendo, pero no mucho, en su justa medida. Tengo que comenzar a entender de autopromoción pero, para decir la verdad, no me molesta”, aclara, “ahora, gracias a la venta de mis obras puedo elegir los clientes con los que trabajo. Me ha cambiado la vida”. Para Zigor, a raíz de su particular experiencia vendiendo arte online, la noción de lo posible ha quedado trastocada. Tanto es así que, al principio de todo esto, cuando aún no conocía lo nuevos códigos de este universo, llegó a rechazar una colaboración con el músico norteamericano Post Malone porque, en vez de pagarle un precio fijo por su trabajo, le ofreció una colaboración a porcentaje en una subasta en criptomonedas, algo que al artista visual no le convenció. “La persona que terminó aceptando tiene hoy dos mansiones”, se lamenta entre risas Zigor. De todas formas habrá revancha porque Zigor se encuentra trabajando en una serie de piezas de animación en colaboración con el youtuber Willyrex que también se subastarán. Los tres artistas entrevistados coinciden es que los NTF han llegado para quedarse y hacer ingresar al arte digital a las grandes ligas. "El boom se va a calmar, esto se va estabilizar pero no creo que vaya a ser algo pasajero", se anima a pronosticar Microbians. ¿Cómo impactará esto en los universos artísticos, en la estética e incluso, en los hábitos de creación y autopromoción de los artistas?, es algo que seguramente nos sorprenderá durante los próximos meses. También te puede interesar:
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