Descubre la historia del logo de Nike: cómo nació el icónico Swoosh, diseñado por una estudiante por solo 35 dólares, y su evolución.
¿Puede un logo valer más que millones? El de Nike nació por apenas 35 dólares y hoy es uno de los símbolos más reconocibles del planeta. Su historia es una lección de branding, intuición y destino.
Un logo por 35 dólares: el origen del Swoosh
En 1971, Phil Knight, uno de los fundadores de Nike, necesitaba un logo para su nueva línea de calzado deportivo. Recurrió a Carolyn Davidson, una estudiante de diseño gráfico que aceptó el encargo por 2 dólares la hora. Al terminar, le pagaron 35 dólares por el diseño.
Davidson creó varias propuestas, pero fue un trazo simple y curvado el que captó la atención de Knight. El ahora famoso Swoosh simboliza el ala de Niké, la diosa griega de la victoria.
Dato curioso: años más tarde, Knight compensó a Davidson con acciones de la compañía que, con el tiempo, valdrían millones.
Evolución del Swoosh: de simple trazo a símbolo mundial
Aunque el logo inicial iba acompañado del nombre "Nike", con el tiempo el Swoosh adquirió suficiente fuerza como para quedarse solo. La simplicidad y dinamismo del diseño encajaron perfectamente con los valores de la marca: velocidad, movimiento y superación.
Con campañas como "Just Do It", Nike convirtió ese trazo en algo más que un símbolo gráfico: un emblema emocional que conecta con la actitud del público.
Más allá del diseño: el poder del branding emocional
El éxito del logo de Nike no se debe solo a su forma. Detrás hay décadas de construcción de marca apoyadas en storytelling, atletas icónicos y campañas sociales que conectan con el espíritu competitivo y de superación.
El Swoosh demuestra que un buen logo no es solo una imagen bonita: es una promesa visual.
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