Nos adentramos en su mundo y descubrimos el porqué detrás de sus ilustraciones
Cristina Daura no llegó a ser plenamente consciente de que la ilustración podía ser una profesión hasta que fue a un museo y pensó “ah, que aquí hay cosas colgadas y la gente paga por ir a verlas”.
Y desde entonces no ha dejado de hacerlo, con ilustraciones, carteles, cubiertas de libros o carteles musicales para medios como The New York Times, El País y editoriales como Penguin, Blackie Books, Anagrama o Alpha Decay, entre otros muchos clientes.
En esta entrevista, buceamos en su universo surrealista y descubrimos el porqué detrás de su uso del color, cómo empezó a ilustrar, sus influencias y lo que pensaría su yo de 16 años de ella. No te pierdas el vídeo a continuación.
Estilo surrealista y pocos colores
Cristina Daura nació en Barcelona en 1988. Y después de estudiar ilustración en La Massana, completó sus estudios en la Maryland Institute Collage of Art (Baltimore). Influenciada por el estilo surrealista, cuenta que descubrirlo supuso un clic en su cerebro. "Ah, que hay una forma en la que se pueden contar cosas de manera más onírica", cuenta en la entrevista. Sus ilustraciones están influenciadas por ese estilo surrealista y tan pronto arden los ojos de sus personajes como crecen flores de sus pupilas.
Otra de los puntos que destacan de sus ilustraciones es el uso que hace del color. "Soy de pocos colores. Para mí el color explica otra narrativa más, como la combinación en la ilustración puede transmitir una cosa u otra. La atención de la persona que lo está mirando se centra en algunas emociones que, en cambio, si tuviera un popurrí de colores sin ninguna intención cromática, se puede llegar a perder un poco lo que tú estás intentando contar", explica Cristina.
Proceso de trabajo
La ilustradora nos explica que suele hacer los bocetos a mano y luego ya los pasa a digital y que intenta usar todas las herramientas que le proporciona el cómic para hacer sus ilustraciones. "De hecho, los proyectos que me plantean los planteo como si fuera una página de cómic. Me gusta pensar que como ilustradora me puedo nutrir de todo lo que veo. Mis referentes de cómic empiezan por el manga, el anime, tragarme toda la televisión posible habida y por haber y todo lo que sería el cómic underground, que para mí fue un descubrimiento brutal", añade.
Consejos y aprendizajes
Cristina cree que si su yo de 16 años viera en lo que se ha convertido a nivel profesional estaría contenta. “El contenido está en conexión con lo que yo siempre he querido contar”, explica la ilustradora. Para ello, han tenido que pasar años de trabajo hasta lograr lo que hace actualmente. Años en los que ha habido muchos aprendizajes.
“Me auto impuse no aceptar cosas en las que yo no me sentiría cómoda”, cuenta Cristina, que recomienda a todos los que estén empezando que tengan mucha paciencia. “El dibujo y dibujar y las ideas no salen de la nada. Se han de trabajar. Uno no nace con un estilo que visualmente encaje, por lo que recomiendo que absorba todo”.
¿Te ha gustado este vídeo? Descubre todos los cursos de ilustración de Domestika en este enlace.
También te puede interesar:
-12 cursos online de ilustración para dominar la técnica en 12 meses
-8 creativos cuentan cómo convirtieron su pasión en su profesión
domestika
No hay comentarios.:
Publicar un comentario