La estrella de la identidad visual nos ofrece su perspectiva única del mundo del branding y el diseño
Paula Scher no es ajena al éxito. Esta diseñadora, artista y profesora es el genio creativo detrás de las identidades visuales de algunas de las marcas más famosas del mundo. Su lista de clientes es envidiable, pues incluye a Coca-Cola, Tiffany & Co, Microsoft, el Ballet de la Ciudad de Nueva York y el Museo de Arte Moderno de Nueva York (MoMA).
En este episodio de Domestika Maestros, descubriremos los desafíos a los que se ha enfrentado en la industria, conoceremos los momentos decisivos de su carrera y aprenderemos algunos tips de experto para creativos en formación.
¿Un mundo de hombres?
Una de las muchas cosas que hacen tan impresionante la carrera de Scher es que logró el éxito en un momento en el que el sector era mayoritariamente dominado por hombres, con pocas mujeres ocupando un puesto directivo. Afortunadamente, fue capaz de encontrar inspiración femenina en otros campos, particularmente en publicaciones de moda. “Me di cuenta de que una mujer podía tener un rol de liderazgo, que no solamente debía trabajar como asistente”, declara Scher en relación a las directoras de arte y editoras que la inspiraron en su momento. En 1991, asumió el cargo de directora en Pentagram, la consultoría de diseño independiente más grande del mundo, convirtiéndose en la primera mujer en lograrlo. “Unirme a Pentagram me enseñó sobre la igualdad”, reflexiona, “de modo que la idea de ver a una mujer manejando una gran compañía me empezó a parecer menos extraña”.
“Aterrorizada por la tipografía”
La primera experiencia de Scher con la tipografía no fue del todo positiva. Al hablar sobre sus estudios de diseño gráfico en la Tyler School of Art and Architecture, lo hace con cierta frustración porque sentía que todo era “como tener que mantener tu habitación limpia, en donde la organización era la única meta del proyecto”. No fue sino hasta que recibió consejo del profesor Stanislav Zagorski cuando realmente comenzó a comprender el potencial de la tipografía. Él la alentó a ilustrar con fuentes y letras, permitiéndole ver que la tipografía también podía ser expresiva más allá de meramente funcional.
Un ícono teatral
El Public Theater, uno de los primeros teatros sin fines de lucro de Estados Unidos, tiene un lugar especial en el corazón de Scher. Fue allí dónde descubrió de qué se trataba en realidad el branding, así como el lugar donde tuvo su primera experiencia con el diseño gráfico ambiental, pues trabajó con arquitectos encargados de diseñar espacios de gran importancia, como el vestíbulo del teatro. En 1995, fue comisionada para crear los pósters del musical Bring in ‘Da Noise, Bring in ‘Da Funk, de Savion Glover, para lo cual utilizó letras mayúsculas de madera, un rasgo distintivo de la identidad visual del Public Theater. El estilo se volvió tan popular que muchos empezaron a copiarlo.
Consejos de Paula Scher para trabajar en el diseño gráfico y la identidad visual:
Prepara a tu cliente
Rediseñar la identidad visual de una empresa puede ser perturbador para los clientes, pues muchos están acostumbrados a ver sus marcas representadas de cierta manera. Incluso, es probable que reaccionen de forma negativa a tus primeras propuestas. La gente se siente más cómoda con lo que le es familiar, así que le toma más tiempo aceptar cualquier modificación, incluso si es para mejorar. El consejo de Scher es que te anticipes a esa reacción y prepares a tu cliente, así estará más dispuesto a ver algo nuevo y diferente. Afortunadamente, también cree que en la actualidad se aceptan las nuevas ideas con más velocidad, en comparación con el pasado.
Ver a través de otros ojos
Uno de los mayores aprendizajes de Scher como profesora ha sido ponerse en los zapatos de sus estudiantes. Tener que ver las cosas desde su perspectiva la ha impulsado a explicar las cosas de forma diferente para ser comprendida, mejorando la comunicación. Así, ha podido aplicar esta misma habilidad a la hora de tratar con sus clientes. Haz que todo cuente
Al preguntarle sobre sus comienzos en la industria, Scher responde con un consejo clave: haz que tus primeros trabajos cuenten. Puede ser que esos primeros empleos no sean decisivos para tu carrera, pero lo que importa es dónde empezaste. “Asegúrate de que tu primer trabajo sea con gente que respetes, que te guste su trabajo y de quienes puedas aprender”, afirma Scher. Como en cualquier tarea que vale la pena, perfeccionar tus habilidades conlleva tiempo y esfuerzo, y siempre se corre el riesgo de adquirir malos hábitos o de atascarse en proyectos sin valor real. Por último, aunque pueda sonar tentador, ¡no tomes un trabajo solo por el dinero! Tu prioridad debe ser buscar oportunidades de aprendizaje y crecimiento profesional.
Versión en español de @arturo_torres_landa
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